Legionellen im Trinkwasser

Legionella en el agua potable

Escrito por: Eric Glasser

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Tiempo de lectura 2 min

La legionela es un tema que preocupa a todos los propietarios de viviendas, arrendadores y gestores de instalaciones públicas, ya que puede provocar graves problemas de salud. Llama la atención que este tema se discuta a menudo de forma incorrecta desde un punto de vista técnico. En contra de la suposición de que beber agua contaminada con legionela provoca la llamada legionelosis, está claro que esto sólo ocurre cuando se pulveriza el agua y se inhala esta niebla. El ejemplo clásico es la ducha. La legionelosis se manifiesta con síntomas que recuerdan a los de la gripe. En personas con un sistema inmunitario débil -como ancianos o niños- la enfermedad favorece el desarrollo de neumonía, que en algunos casos conduce a la muerte. Se calcula que cada año mueren en Alemania unas 2.000 personas como consecuencia de la legionelosis. Es difícil elaborar estadísticas fiables sobre el número de personas infectadas, ya que los síntomas son muy similares a los de la gripe y la enfermedad rara vez evoluciona a neumonía.


CONTROL COSTOSO DE LA LEGIONELA AUMENTANDO LA TEMPERATURA DEL AGUA


Desde finales de 2011, existe una modificación de la Ordenanza de Agua Potable relativa a la legionela. Esta estipula que los propietarios deben realizar una prueba de legionela cada tres años y, por lo tanto, ocuparse ellos mismos de la protección contra la legionela. Tras las primeras pruebas de legionela, las autoridades sanitarias prohibieron a algunos inquilinos ducharse en su propia casa. Una primera opción rápida y a corto plazo es calentar la temperatura del circuito de agua caliente a más de 60°C. Aunque esto puede contrarrestar la legionela, sigue existiendo incertidumbre térmica sobre si el agua se ha calentado realmente a 60°C. También existe la duda de si las juntas, los accesorios y las tuberías se han desinfectado realmente. Además de estas incertidumbres, este tipo de desinfección es costosa, insostenible y plantea un problema considerable para los inquilinos, ya que pueden escaldarse con el agua calentada a 60°C. Esta opción es especialmente costosa para los usuarios de un sistema solar, ya que el agua, que se calentaba a 40-50°C utilizando energía solar, ahora tiene que calentarse a más de 60°C utilizando electricidad adicional. Además, las legionelas están relativamente bien protegidas contra los desinfectantes químicos, lo que significa que la dosis necesaria para matarlas supera con creces los límites autorizados.


LA DESINFECCIÓN UV-C COMO PROTECCIÓN FIABLE CONTRA LA LEGIONELLA


Las numerosas incertidumbres en los ámbitos sanitario, jurídico y técnico exigen una solución diferente, rápida y a largo plazo. Aquí es precisamente donde radican los puntos fuertes de un sistema de desinfección UV-C. El uso selectivo de la luz en la gama UV-C permite eliminar la legionela de forma segura, sin incertidumbre térmica ni riesgo de quemaduras. La desinfección de la legionela tiene lugar directamente en el circuito de agua caliente. El agua circula continuamente por el sistema UV-C, evitando así de forma fiable el riesgo de legionelosis. Estos sistemas no sólo son adecuados para viviendas unifamiliares y grandes complejos residenciales gracias a su alto rendimiento, sino que también requieren poco mantenimiento y son totalmente respetuosos con el medio ambiente. Así, ducharse vuelve a ser divertido.